Es fundamental el correcto desarrollo y la buena salud de las raíces de las plantas de marihuana, y te preguntarás, ¿por qué es tan importante?. Es importante porque las raíces son su aparato digestivo (y como todo ser vivo, las plantas necesitan alimentarse) y su columna vertebral.
Las raíces, también denominadas sistema radicular, son las responsables de la buena alimentación de las plantas, mediante la captación y la asimilación de los nutrientes que se encuentran en la tierra o en el sustrato.
¿Qué funciones cumplen las raíces?
- Aseguran la hidratación y el aporte de los nutrientes.
- Fijan la planta en el suelo.
- Aseguran las reservas alimenticias en caso de carencias o de estrés hídrico (carencia de agua y de nutrientes).
¿De cuántas partes se constituye una raíz?
- La zona suberosa: es la parte de la raíz que sostiene las raíces secundarias.
- La zona pilífera: compuesta por unos capilares (pelos absorbentes) que unen la planta al suelo. También ayudan a generar la absorción del agua y de las sales minerales.
- La zona de crecimiento: compuesta por el meristemo, se encarga de la multiplicación celular y del alargamiento. Se sitúa detrás de la cofia.
- La cofia: es la encargada de proteger la raíz y sus extremidades. También permite la penetración en el suelo, y protege los tejidos de crecimiento.
Raíces sanas y fuertes en las distintas fases del cultivo
1. Fase de crecimiento
Es el momento en el que se desarrolla la estructura vegetativa, por lo cual, hay que prestarle mayor atención al desarrollo radicular de las plantas de marihuana. De esta etapa dependerá lograr una planta con mayor capacidad productiva, y con un mejor sistema de defensa ante cualquier posible ataque de patógenos y de parásitos.
Es fundamental iniciar el cultivo utilizando un sustrato rico y de calidad, al igual que una tierra fresca, la cual favorezca la aireación del suelo, el drenaje, y cierta retención de humedad (perlita, fibra de coco, turba blanca, etc)
Te recomendamos, antes de colocar las plántulas en la tierra, incorpores algún agente regulador y protector del sustrato en el lugar en el cual pondrás las raíces de las plántulas.
Es muy importante garantizar la capacidad respiratoria de la tierra. En caso contrario, las raíces no podrán desarrollarse correctamente. Podrían inclusive asfixiarse, fomentando el estancamiento de la humedad. Una tierra con un alto nivel de humedad tampoco es sano para nuestras plantas, ya que ralentiza su crecimiento, favorece la putrefacción de las raíces, las debilita, y fomenta la aparición de hongos y de parásitos.
Para evitar todo eso, sería ideal utilizar como contenedor una maceta Mad Rocket, ya que facilita la oxigenación del sustrato.
En cuanto a la temperatura y la humedad, es fundamental que haya un clima estable durante el desarrollo inicial de las primeras raíces:
- HUMEDAD: ENTRE UN 75 Y 80%
- TEMPERATURA: ENTRE 23 Y 28°C
Los estimuladores de raíces se recomienda usarlos una vez que las plantas alcancen los 10-15 cm y tengan entre uno y dos pares de hojas. Recién ahí podrás mezclar con el agua entre 0,2 y 0,4 ml/L de un estimulador de raíces (según el producto). Anterior a esto, tendrás que haber ajustado el PH del agua entre 6,0 y 6,2.
Tendrás que realizar una única aplicación semanal durante todo el ciclo de vida de la planta (crecimiento y floración). A la semana, aumentaremos la dosis a 0,8 – 1 ml/L y mantendremos los valores del PH. Y a la semana siguiente, duplicaremos la dosis a 1,8 – 2 ml/L.
Entonces, el nivel de humedad deberá disminuir a un 65% y la temperatura ideal rondará entre los 22 y los 26°C. A la semana siguiente (final de la etapa crecimiento), aumentaremos la dosis progresivamente hasta 3,6 – 4 ml/L con un nivel de PH que rondará los 6,2 – 6,4.
Para evitar un shock térmico, la temperatura del agua tendrá que ser la misma ó similar a la temperatura ambiental del espacio de cultivo.
Como mencionamos anteriormente, la etapa de crecimiento es la etapa más importante para nuestras plantas. Una etapa de crecimiento exitosa nos garantizará plantas saludables y fuertes, de las cuales obtendremos flores de marihuana abundantes y de gran calidad.
2. Fase de floración
Habiendo logrado una buena estructura de nuestras raíces con un buen sistema de defensa, esta próxima fase será mucho más sencilla. Lo único que tendremos que hacer será recordar el método de riego y mezclar 4 ml/L de estimulador de raíces con la solución nutritiva una vez por semana. Durante los últimos 15/20 días tendremos que dejar de usar fertilizantes/estimuladores para empezar con el aclarado de las plantas. Y después, solo nos quedará cosechar.